Los grafitis en colaboración con asociaciones de integración social son proyectos artísticos con un fuerte componente comunitario y educativo. Estas iniciativas buscan fomentar la inclusión, la participación activa y la expresión creativa de colectivos en situación de vulnerabilidad, como jóvenes en riesgo de exclusión, personas migrantes o con discapacidad. A través del arte urbano, se promueve el trabajo en equipo, la autoestima y el sentido de pertenencia, al mismo tiempo que se embellecen espacios comunes y se transmiten mensajes positivos. Más que murales, son herramientas de transformación social construidas desde el diálogo y la creatividad compartida.